La astrología es un lenguaje muy rico, lleno de símbolos y significados profundos, pero tiene ciertos elementos básicos —que, si queremos empezar a aprender sobre astrología, son esenciales, porque los utilizaremos y revisaremos constantemente—. Las casas son parte del idioma básico de la astrología y forman uno de sus pilares fundamentales. Las casas en astrología son indispensables para entender cómo se construye una carta natal, ya que son las que le otorgan su estructura. Como su propio nombre lo indica, las casas son lugares donde “se alojan”...
La astrología es un lenguaje muy rico, lleno de símbolos y significados profundos, pero tiene ciertos elementos básicos —que, si queremos empezar a aprender sobre astrología, son esenciales, porque los utilizaremos y revisaremos constantemente—. Las casas son parte del idioma básico de la astrología y forman uno de sus pilares fundamentales.
Las casas en astrología son indispensables para entender cómo se construye una carta natal, ya que son las que le otorgan su estructura. Como su propio nombre lo indica, las casas son lugares donde “se alojan” cosas, y es precisamente este concepto el que nos permite comprender cómo se organizan las áreas de nuestra vida dentro de la astrología.
Las 12 casas. A la izquierda, el Ascendente (AC) es la línea que las inicia.
El punto de partida de las casas es el ascendente, que marca el inicio de todo. A partir de este punto clave, se distribuyen las doce casas alrededor de la carta, cada una representando un área específica de nuestra existencia. Pensar en las casas como “lugares” es esencial, ya que nos permite entender su función como divisiones simbólicas de nuestra vida cotidiana, desde nuestras relaciones, trabajo y hogar, hasta los recursos internos y externos que poseemos.
Es crucial distinguir las casas de los signos zodiacales. Mientras que las casas representan áreas de la vida, los signos son las maneras de abordar esas áreas. En otras palabras, los signos describen cómo hacemos las cosas, pero no definen las áreas donde esas acciones se manifiestan. Esta diferencia es básica pero, a menudo, genera confusión entre quienes recién comienzan a explorar la astrología.
En otras entradas profundizaremos en la relación entre los signos y las casas, pero por ahora, basta con recordar que las casas son los “lugares” que conforman la estructura de la carta natal y que nos permiten explorar las diferentes facetas de nuestra vida. Cada una tiene su propia energía y enfoque, y juntas forman el mapa de nuestro mundo personal.
¿Y Por Qué Se Llaman Casas?
Históricamente, las casas astrológicas se conocían como “moradas” o “domicilios”. El término “domicilio” proviene del latín domum, que significa “hogar”. La palabra “morada” deriva del latín morari, que significa “retener”, mientras que “domicilio” está relacionado con “dirigir”, siendo dominus el dueño de la casa.
Esta terminología refleja la concepción de que cada sector del zodíaco actúa como una “casa” o “morada” para diferentes aspectos de la vida humana, albergando las influencias planetarias que afectan esas áreas específicas. Con el tiempo, el término “casa” se consolidó en la astrología moderna para describir estas doce subdivisiones, cada una asociada a diferentes experiencias y actividades humanas.
El Significado de Cada Una de Las 12 Casas:
Casa 1: La Identidad y el Yo
Representa nuestra personalidad, apariencia física y cómo nos presentamos al mundo. Es el inicio de nuestra vida, donde se refleja nuestra percepción de “ser”.
Casa 2: Recursos y Valores
Asociada con las posesiones materiales, el dinero y los valores personales, esta casa describe cómo manejamos nuestros recursos y qué consideramos valioso en la vida.
Casa 3: Comunicación y Aprendizaje
Representa la comunicación, el pensamiento lógico, la educación básica y las relaciones con hermanos, vecinos y el entorno cercano. También está ligada al transporte y los viajes cortos.
Casa 4: El Hogar y las Raíces
Simboliza el hogar, la familia, nuestras raíces y la vida privada. También indica la conexión con nuestros antepasados y cómo construimos nuestra seguridad emocional.
Casa 5: Creatividad y Placer
Es la casa de la creatividad, el romance, los hobbies y los hijos. Representa la autoexpresión, el disfrute y todo aquello que hacemos para sentir alegría.
Casa 6: Trabajo y Salud
Ligada al trabajo cotidiano, la rutina y la salud física, esta casa se enfoca en el servicio, las responsabilidades y cómo cuidamos nuestro bienestar.
Casa 7: Relaciones de Uno a Uno y Asociaciones
Es la casa de las relaciones de pareja, las asociaciones y los contratos. Refleja cómo nos conectamos con los demás en relaciones de uno a uno, en igualdad y compromiso.
Casa 8: Transformación y Recursos Compartidos
Asociada con la transformación profunda, los recursos compartidos, la intimidad emocional y el renacimiento. También abarca temas como herencias, inversiones y la muerte simbólica o literal.
Casa 9: Filosofía y Expansión
Esta casa se enfoca en los estudios superiores, la espiritualidad, los viajes largos y las creencias. Representa la búsqueda de significado y la expansión de horizontes.
Casa 10: Carrera y Reputación
Esta casa simboliza nuestra carrera, logros y reputación pública. Es donde aspiramos a alcanzar nuestras metas y dejamos una huella en el mundo.
Casa 11: Comunidad y Objetivos a Largo Plazo
Representa las amistades, los grupos sociales y los objetivos a largo plazo. También está relacionada con nuestra conexión con la comunidad y el deseo de contribuir al colectivo.
Casa 12: El Inconsciente y el Retiro
Simboliza el inconsciente, la introspección y los procesos internos. Es la casa del retiro, la espiritualidad profunda y las lecciones kármicas. También puede estar asociada con secretos y temas que necesitan sanación.