La Próxima Revolución de Júpiter de Venezuela (2024 y 2025)

Las revoluciones de Júpiter representan un ciclo significativo que ocurre aproximadamente cada 12 años, cuando Júpiter regresa a la misma posición que ocupaba en la carta natal de un país o individuo. En astrología mundana este tránsito simboliza un período de expansión, crecimiento y oportunidades en las áreas que Júpiter rige, como la justicia, la ley, la educación, la religión y las relaciones internacionales.

Durante una revolución de Júpiter, un país puede experimentar un renovado enfoque en temas legales y judiciales, reformas políticas o legales, y un aumento en la visibilidad internacional. Este tránsito también puede estar asociado con el crecimiento económico y el desarrollo cultural. Sin embargo, Júpiter amplifica lo que encuentra, por lo que puede también magnificar problemas existentes si no se gestionan adecuadamente.

Así, las revoluciones de Júpiter marcan un momento de oportunidad de expansión y cambio positivo, pero también pueden resaltar desafíos que requieren atención y resolución. Este ciclo es una oportunidad para que las naciones alineen sus estructuras y políticas con principios de justicia y equidad.

Revolución de Júpiter Anterior: Maduro Llega al Poder

En la Revolución de Júpiter de Venezuela que comenzó el 16 de mayo de 2013, el Ascendente estaba en Tauro, en conjunción prácticamente exacta con el Sol en Tauro. En astrología mundana, el Sol representa al líder o gobernador, lo que enfatiza el papel central de Nicolás Maduro en este período. La posición del Sol en conjunción con Marte en la Casa 12 sugiere la presencia de una energía marcial (el ejército está regido por Marte) y oculta, indicando posibles conflictos y tensiones tras bambalinas que impulsaron los cambios de poder. La Casa 12 es conocida por regir asuntos ocultos, secretos y actividades que no son visibles públicamente, lo que puede haber contribuido a un ambiente de manipulación y control detrás de escena, en la que el ejército es parte clave.

Además del Sol, en la Casa 1 se encuentran Mercurio en Géminis y Venus en Géminis, ambos en cuadratura a Neptuno en Piscis en la Casa 10. Esta cuadratura indica posibles confusiones o ilusiones relacionadas con la imagen pública del gobierno y las comunicaciones oficiales. Neptuno en la Casa 10 puede señalar una percepción distorsionada o engañosa de la situación real nacional, modificando la reputación del país y afectando la transparencia del liderazgo. 

En la Revolución de Júpiter de 2013, Júpiter estaba inaspectado en la Casa 1, una configuración que simboliza una energía que puede operar sin contención ni regulación, llevando a manifestaciones extremas. Esta falta de aspectos puede hacer que la influencia de Júpiter sea amplificada y descontrolada, especialmente en áreas relacionadas con la justicia y la filosofía de vida del país. Durante esta revolución, Júpiter también era regente de la Casa 8 (asociada con transformaciones y crisis) y de la Casa 11 (relacionada con el parlamento y otras organizaciones colectivas).

En el contexto de la situación legal en Venezuela durante este tiempo, el ascenso al poder de Nicolás Maduro estuvo marcado por el uso amplio de poderes ejecutivos y la manipulación de las leyes para consolidar su control. Una característica notable fue la convocatoria y uso de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), que fue creada sin una consulta popular adecuada y operó fuera del marco legal establecido. Esta ANC asumió poderes legislativos, desplazando al parlamento elegido y eliminando la independencia del poder judicial. Esta acción marcó un colapso casi total del estado de derecho en el país, permitiendo que las decisiones y acciones del gobierno de Maduro no tuvieran prácticamente ninguna oposición legal o constitucional efectiva.

Revolución de Júpiter 2024: Transformación en Tres Etapas

Para la Revolución de Júpiter de 2024, Venezuela experimentará tres revoluciones de Júpiter. Este fenómeno ocurre porque Júpiter primero atraviesa el punto en donde Venezuela tiene su Júpiter (grado 20°46' de Géminis) en movimiento directo, luego retrocederá sobre el mismo punto durante su fase retrógrada, y finalmente lo cruza una vez más cuando vuelve a avanzar en movimiento directo.

Estas tres revoluciones indican un proceso continuo y profundo de revisión y ajuste. La primera revolución marca el inicio de nuevos comienzos y expansiones, mientras que la segunda, durante la fase retrógrada, ofrece una oportunidad para reflexionar y reevaluar decisiones anteriores. La tercera revolución, cuando Júpiter vuelve a movimiento directo, representa la consolidación de los cambios y un enfoque renovado sobre los temas revisados.

Para Venezuela, estas tres revoluciones se espaciarán hasta finales de abril de 2025. Este proceso prolongado sugiere un período de cambios significativos y de ajuste en áreas clave, especialmente en la justicia y las políticas públicas. Es un período de evolución gradual, donde cada fase trae consigo oportunidades para el crecimiento y la corrección de curso en respuesta a las lecciones aprendidas. 

Primera Revolución: 20 de Septiembre de 2024

En la primera Revolución de Júpiter, el Ascendente está en Piscis, lo cual indica que esta fase será la más confusa de las tres revoluciones. Si bien Piscis como energía tiene muchas cosas positivas, en el contexto de la crisis actual de Venezuela lo más probable es que veamos su lado más oscuro. Así, Piscis se asocia con la confusión, el caos y la desorientación, y la sensación de que todo está indefinido. 

El regente moderno de Piscis, Neptuno, se encuentra retrógrado en la Casa 1, en oposición al Sol en Virgo en la Casa 7. El hecho de que Neptuno esté retrógrado sugiere que no habrá soluciones rápidas ni claras durante este período. Los planetas retrógrados suelen implicar un proceso más lento y una necesidad de introspección y revisión, lo que significa que esta confusión y desorientación se prolongarán.

La oposición de Neptuno retrógrado con el Sol en la Casa 7 sugiere que durante esta primera fase de la Revolución de Júpiter, el enfoque del gobierno venezolano probablemente estará más dirigido hacia sus relaciones con otros países que hacia la resolución de problemas internos. Esta configuración astrológica indica una tendencia a priorizar la gestión de las relaciones exteriores, ya sea para fortalecer alianzas, cortar lazos o manejar la imagen internacional del país.

Después de las elecciones, ha habido indicios de que Venezuela podría estar más preocupada por su posición en el escenario global y por cómo se perciben sus acciones internacionalmente, en lugar de abordar los desafíos internos urgentes. Esto puede incluir esfuerzos para manejar críticas o sanciones internacionales, ajustar políticas exteriores o incluso cortar relaciones diplomáticas. La oposición entre Neptuno y el Sol refleja una posible desconexión entre las necesidades internas y las acciones externas, donde el gobierno podría estar utilizando su energía y recursos para tratar de controlar la narrativa y las relaciones exteriores, dejando en segundo plano la solución de problemas domésticos críticos.

Además, Mercurio en Virgo en la Casa 7 está en oposición a Saturno retrógrado en Piscis en la Casa 12, lo que resalta temas de censura y limitaciones en la comunicación. Esta configuración indica que la información puede ser restringida o distorsionada, y que los esfuerzos para comunicar de manera clara y efectiva seguirán enfrentando barreras significativas. Saturno retrógrado sugiere una revisión de asuntos del pasado y posibles secretos o temas ocultos que pueden complicar la situación.

Júpiter se encuentra en conjunción con el Imum Coeli (IC), un punto clave que representa las raíces y el hogar de un país, así como sus fundamentos más profundos y la tierra misma. Esta posición sugiere una revisión y posible reestructuración de las bases fundamentales del país, afectando tanto a su identidad como a su estabilidad interna.

Júpiter en esta posición está en cuadratura con Mercurio en el Descendente, lo que indica posibles tensiones en la comunicación y en las relaciones con los demás, especialmente con respecto a temas de justicia y legalidad. Esta cuadratura puede manifestarse como desafíos en las negociaciones o conflictos relacionados con la información y la comunicación, ya sea a nivel interno o externo.

Además, Marte está posicionado en la Casa 4, que rige el hogar y las raíces nacionales, y forma una cuadratura con los nodos lunares, indicando una encrucijada kármica y desafíos relacionados con el pasado y el futuro del país. La cuadratura con los nodos indica un período de fuerte inestabilidad doméstica, que en casos extremos puede incluir disturbios civiles o conflictos internos, como una guerra civil.

Esta configuración también sugiere conflictos tal vez relacionados con la propiedad o el control de recursos, que están destinados a ser confrontados y resueltos durante este período. Estos aspectos señalan un momento crítico para Venezuela, donde las energías están empujando hacia un reexamen y posible transformación de sus estructuras fundamentales y sus relaciones con el mundo exterior.

Segunda Revolución: 27 de Octubre de 2024

Segunda Revolución de Júpiter de Venezuela (27/10/2024 09:43, Caracas, Venezuela).

En la segunda Revolución de Júpiter de Venezuela, el Ascendente se encuentra en el grado 21°36' de Sagitario, enfatizando termáticas relacionadas con leyes, justicia y relaciones internacionales. El símbolo sabiano correspondiente al grado 21° de Sagitario es Sagitario 22, "una lavandería china". Este símbolo se asocia a mantenerse dentro de los propios límites culturales y tradicionales, sin mucha apertura hacia influencias externas. Es un símbolo que refleja una tendencia a la introspección y al mantenimiento de la propia identidad cultural, resistiendo cambios o influencias externas significativas, por lo que aplicándolo en esta Revolución de Júpiter, nos sugiere que no habrá cambios externos considerables aún con respecto al régimen de Maduro. 

Los símbolos sabianos tienen una interpretación simbólica pero también pueden entregar mensajes literales, por lo que el Ascendente en "una lavandería china" podría tener una connotación literal, insinuando un posible rol central de China en esta etapa, ya sea a través de inversiones, apoyo político, o alianzas estratégicas. 

En esta segunda Revolución de Júpiter de Venezuela, Júpiter se encuentra inaspectado y retrógrado. Aunque un planeta inaspectado puede indicar una expansión sin freno, el hecho de que esté retrogradando es otro elemento más que nos habla de una influencia más introspectiva y reflexiva, poco dada al cambio externo. 

El hecho de que Júpiter esté inaspectado sugiere que hay asuntos asociados a leyes, ética y relaciones internacionales que han sido postergados o desatendidos durante mucho tiempo. Esto puede implicar que durante esta fase, se revele una acumulación de problemas o situaciones no resueltas relacionadas con el marco legal y las relaciones exteriores de Venezuela. El proceso de revisar y abordar estos temas podría ser más desafiante y lento debido a la naturaleza retrógrada de Júpiter.

  Créditos: Reuters

Esta revolución, al igual que la primera con Marte en cuadratura a los nodos lunares, presenta una característica notablemente violenta. Marte se encuentra en la Casa 8, un lugar que rige temas de transformación profunda, recursos compartidos y, a menudo, muertes y situaciones de crisis. Marte, el planeta de la agresión y el conflicto, está en oposición a Plutón en Capricornio en la Casa 2, que representa los poderes ocultos con respecto a las finanzas y los recursos materiales del país.

La oposición entre Marte y Plutón sugiere una dinámica de conflicto y poder, con posibles luchas intensas y violentas relacionadas con los recursos y la economía. Este aspecto puede manifestarse en tensiones financieras, disputas por el control de recursos y, potencialmente, conflictos internos que afecten la estabilidad del país. La Casa 8, asociada con la muerte y la regeneración, indica que estos conflictos pueden llevar a transformaciones profundas y dolorosas.

El último tránsito de Plutón por Capricornio nos trae a nivel global la caída de estructuras jerárquicas y la transformación de las viejas formas de poder, por lo que esta segunda Revolución de Júpiter ocurre en este contexto. Esta última estadía de Plutón en Capricornio no será nada fácil para el mundo, por lo que sumado a la oposición con Marte en esta Revolución de Júpiter, es prácticamente un hecho que veremos una exacerbación los conflictos internos y las tensiones relacionadas con el poder y los recursos. Si las energías de este ciclo se aprovechan de forma constructiva, darán paso a nuevas dinámicas de poder (que esperemos sean más sanas que las que Venezuela actualmente tiene).

Tercera Revolución: 27 de Abril de 2025

Tercera Revolución de Júpiter de Venezuela (27/04/2025 20:58, Caracas, Venezuela). 

En la tercera Revolución de Júpiter para Venezuela el Ascendente vuelve a estar en Sagitario, lo que mantiene el enfoque en temas de justicia, leyes y asuntos internacionales. Pero, esta vez el Ascendente está ubicado en el grado 11°10' del signo, con el símbolo sabiano correspondiente siendo Sagitario 12: "una bandera que se convierte en un águila; el águila canta saludando el amanecer". Este símbolo sugiere un fuerte sentido de transformación y despertar de una nueva era.

La imagen de una bandera que se transforma en un águila simboliza un cambio de identidad o de perspectiva, señalando un momento en que un colectivo (representado por la bandera) se eleva a una nueva comprensión o estado de ser (representado por el águila). El águila, conocida por su vista aguda y su capacidad de volar alto, simboliza la claridad, la visión y la libertad. El hecho de que el águila cante saludando al amanecer sugiere un nuevo comienzo, un despertar a nuevas posibilidades o verdades.

Para Venezuela, este símbolo puede indicar un momento de claridad y revelación, donde el país podría experimentar una transformación significativa en su identidad o dirección. Es un símbolo de esperanza y renovación, sugiriendo que después de un período de confusión o desafío, puede haber un surgimiento de una nueva comprensión o una nueva dirección.

A diferencia de lo que ocurre con la segunda Revolución de Júpiter, en esta ocasión, Júpiter se encuentra directo, lo que indica un potencial de que los cambios internos de las dos revoluciones anteriores puedan comenzar a manifestarse de manera clara en la situación política del país. Júpiter vuelve a situarse en la Casa 7 en la tercera Revolución, que representa las relaciones con otros países y las asociaciones.

Asimismo, en esta tercera revolución Júpiter está en cuadratura con los nodos lunares, lo que indica un punto de tensión y desafío kármico. Los nodos lunares, que representan el camino del destino y los desafíos a superar a nivel espiritual, sugieren que las relaciones exteriores y los acuerdos internacionales de Venezuela estarán en un punto crítico. Esta cuadratura puede manifestar situaciones de conflicto o decisiones difíciles que afectarán la dirección futura del país.

Venezuela enfrenta aquí la posibilidad de dar un salto de fe, de eliminar excesos y de arriesgarse a pensar en sus leyes y ética de una manera nueva. La presencia de Júpiter en la Casa 7 sugiere que este proceso estará fuertemente influenciado por las asociaciones y las dinámicas con otros países. Es un momento para considerar nuevas alianzas y redefinir las relaciones internacionales con un enfoque en la justicia y la verdad.

A pesar de las oportunidades que esta configuración presenta, el país deberá ser paciente, ya que esta transformación no ocurrirá de inmediato. Se requerirá tiempo para que los cambios de esta configuración se manifiesten completamente, y Venezuela tendrá que navegar con cuidado para asegurarse de que estas nuevas direcciones sean sostenibles y beneficiosas a largo plazo.

Por otra parte, en esta tercera Revolución de Júpiter vuelve a aparecer la oposición de Marte y Plutón, pero con Marte en Leo en la Casa 8 y **Plutón en Acuario en la Casa 2, ambos en signos fijos. Esta configuración no solo subraya el conflicto entre las élites y autoridades (Leo) y el pueblo (Acuario), sino que también indica una inflexibilidad significativa en ambas partes. Los signos fijos son conocidos por su resistencia al cambio, lo que sugiere que durante esta fase habrá una gran dificultad para adaptarse y aceptar nuevas realidades o transformaciones necesarias.

La posición de Marte en Leo puede representar a las figuras de poder que se aferran firmemente a sus posiciones, mientras que Plutón en Acuario puede simbolizar el deseo del pueblo de transformar y revelar verdades ocultas, particularmente en torno a los recursos y el poder económico. Sin embargo, la naturaleza fija de estos signos indica una resistencia considerable a estos cambios, tanto desde las autoridades como desde la población.

Esto implica que durante esta última Revolución de Júpiter, habrá una tensión intensa y duradera. La inflexibilidad de las partes involucradas podría hacer que el proceso de transformación sea más difícil y prolongado. Para que realmente se inicie una nueva etapa en Venezuela, será crucial encontrar maneras de superar esta resistencia y permitir que las transformaciones necesarias se desarrollen de manera efectiva. La dureza y la persistencia de las energías fijas significan que cualquier cambio que ocurra será profundo y duradero, pero también que el camino hacia ese cambio estará lleno de desafíos y resistencia.

Y por último, esta tercera Revolución de Júpiter tendrá una Luna Nueva en Tauro en las Casas 5 y 6. La fase de Luna Nueva siempre sugiere nuevos comienzos, por lo que este es otro elemento auspicioso para que se produzca un cambio en el país. Sin embargo, existe una cuadratura del Sol a Plutón y a Marte, poniendo de relieve posibles conflictos relacionados con la extracción del petróleo. Tauro, signo asociado con los recursos materiales y la estabilidad financiera, y Plutón, que rige lo que se extrae de debajo de la tierra, sugieren que el manejo de los recursos naturales, especialmente el petróleo, será un tema crítico durante este período.

Además, esta configuración resalta la necesidad de Venezuela de reevaluar su sentido de merecimiento y valor, buscando una nueva estabilidad que se alinee con una gestión más consciente y sostenible de sus recursos. La influencia de Tauro en esta Luna Nueva sugiere que es un momento para centrarse en lo que realmente importa y en construir una base sólida para el futuro, tanto en términos materiales como de valores. Tauro es un signo pacífico y estable, por lo que definitivamente el potencial de este tercer ciclo es positivo con respecto a la resolución de esta larguísima crisis que el país ha venido atravesando a lo largo de los años.